Angela Maroto, es residente desde hace 1 año y 6 meses
Ángela Maroto
- ¿Cuál es el motivo por el cuál decidiste venir a vivir a la Residencia San Francisco y San Vicente?El motivo principal que me llevó a decidirme por ingresar en una residencia fue porque sufrí un accidente con un autobús. Hasta ese día había vivido sola en mi casa. Iba a comprar, me cocinaba, hacía pequeños paseos por mi barrio,… Hasta que de la noche a la mañana me vi impedida. No podía permanecer en mi casa ya que necesitaba muchos cuidados, muchos de ellos sanitarios, que en esos momentos mi familia no me podía ofrecer. Así que decidimos buscar una residencia. Tuve suerte de que Dios me pusiera ésta en el camino.
- ¿Qué ventajas ves al vivir en la residencia?Ventajas veo muchas, pero la principal es que estoy muy bien atendida. Si estuviera en mi casa tendría que hacerlo todo yo o buscar a más de una persona que me pudiera ayudar. Aquí lo tengo todo hecho. Cuando me limpian la ropa me la dejan bien planchadita y doblada encima de mi cama. Si me duele el brazo, voy a la doctora, a la enfermera o a la fisio.
Soy consciente que en mi casa esto no lo tendría.
Es verdad que te tienes que acostumbrar a tratar con personas que no conoces, pero incluso eso es una ventaja porque haces nuevas amistades. Cuando yo llegué no conocía a nadie. Ahora me relaciono con todos.
- ¿Te gustan las actividades que te ofrece el centro?Sí. La TASOC inmejorable. Insiste en que haga las cosas que yo creo que no puedo hacer. Me gusta que confíe en que puedo hacerlo.
Disfruto con la gimnasia y el parchís. Pero lo que realmente me encanta son las charlas con el grupo de conversación junto con la psicóloga y los talleres de memoria con la TASOC.
- ¿Cómo describirías la vida en la residencia?Siempre existen comentarios que dicen que en sus casas estaban mejor. Yo no lo discuto. Tu casa es tu casa. Pero yo aquí estoy muy bien. No dejo de darle gracias a Dios todas las noches por haberme abierto esta puerta.
Lo bueno es que cada uno hace lo que quiere. Puedes acudir a las actividades, pasear por el jardín, puedes salir a la calle, ver la tele, tomarte un café con tus familiares y amistades,…
Si tuviera que describir con un adjetivo a la residencia le pondría: Casera.
- ¿Te sientes bien atendida en la residencia?Muy bien atendida. Todas las chicas (auxiliares) me tratan genial. Me hacen bromas. Yo les hago bromas. Nos hacemos reír. ¿Qué te puedo decir? Creo que no me pueden tratar mejor.
- ¿Cuál es tu experiencia en el centro?Muy buena.
Por suerte o por desgracia conozco otra residencia. En general tenía muy buena presencia. Había sillones estupendos. Pero prefiero una silla aquí, que un sillón allá. No me confundas, la otra era y es una buena residencia. Tiene muy buena fama, pero la familiaridad y el trato que he encontrado aquí no la tiene aquella.
- ¿Qué te has encontrado después de casi dos años viviendo aquí?Encontré buenas instalaciones, un equipo profesional muy humano y alguien que me atendió en el momento que más lo necesitaba.
Echo de menos mi casa. Es normal ¿no? Pero me encuentro muy a gusto aquí, mi habitación es como si fuera mi “casita”. Aquí me siento como si formara parte de una “gran y rara” familia.
- ¿Les dirías algo a las personas que no tienen la experiencia de vivir en una residencia?Hay mucha gente que las residencias le parecen un claustro, pero a mí no me lo parece. No tengo menos libertad que la que tenía en mi casa.
Seguro que hay de todo tipo de residencia, pero si todas fueran como esta no le veo ningún inconveniente en hacer de la residencia tu segunda casa.
Nuestras Experiencias Más Recientes
Testimonios
¿Necesita más información?
Si necesita conocer más sobre nuestras instalaciones o servicios no dude en ponerse en contacto con nosotros. Le atenderemos cuanto antes y sin ningún tipo de compromiso. Adelante, ¡pregúntenos!